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La puesta en marcha de sistemas de monitorización será de gran ayuda en la evaluación de los pacientes con enfermedades del sistema neuromusculoesquelético (SNMS) al poder contar con métodos de valoración funcional y a medida, acordes a la situación real del propio paciente. Este es uno de los principales objetivos del proyecto de la red IBERUS y que ofrecería una evaluación a los profesionales sanitarios del impacto real de la pérdida funcional en la vida de las personas con este tipo de patologías.

La investigación desde una perspectiva principalmente clínica, enfocada tanto a definir indicadores de valoración y terapias adecuadas para las enfermedades del sistema neuromusculoesquelético (SNMS), como para crear los escenarios de demostración de las tecnologías que se desarrollen dentro de la red IBERUS, es fundamental para obtener resultados que puedan ser de utilidad en este tipo de enfermedades. En esta red, junto a ITCL participan los centros tecnológicos IBV de la Comunidad Valenciana, Fundación CTIC de Asturias y Tekniker del País Vasco.

La visión de los profesionales

En este sentido, los integrantes de la red han trabajado en la evaluación de esos requerimientos y criterios de calidad que entiende como necesarios para poder desarrollar sistemas de monitorización en el entorno clínico. De este modo, ITCL ha participado llevando a cabo una serie de entrevistas con “agentes clave” del entorno sanitario, entre los que se encuentran especialistas en rehabilitación, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, neurólogos y logopedas.

Todos ellos perfiles muy centrados en las secuelas que dejan las enfermedades SNMS en los pacientes, y cuyo trabajo se centra en la rehabilitación y el apoyo social. Asimismo, se ha entrevistado a investigadores y consultores de experiencia con el paciente, para disponer de una visión más global que, además de centrarse en el paciente, pusiera el foco en las tecnologías empleadas en estos procesos asistenciales. Del trabajo realizado desde ITCL, cabe destacar que en el entorno clínico el uso de las tecnologías está muy poco integrado en su día a día, centrando su uso principalmente a proyectos de investigación. Aun así, los profesionales sanitarios consultados destacan la utilidad y funcionalidad que los sistemas de monitorización ya que, “éstos pueden ofrecer una evaluación del impacto real de la pérdida funcional en la vida de las personas”. Un dato a tener en cuenta, por la complejidad para extrapolar las evaluaciones realizadas en consulta a las necesidades reales de los pacientes en función de su entorno laboral o social.

Evaluación real y a medida

Las nuevas tecnologías, desarrolladas en el marco de IBERUS, pueden ser positivas de cara a personalizar la evaluación de los pacientes diseñando métodos de valoración funcional, a medida, acordes a la situación real del propio paciente. Las tecnologías desarrolladas dentro de IBERUS han de proporcionar información sencilla y fácil de analizar y accesible para que sean herramientas dinámicas dentro de un entorno clínico.

Estas herramientas pueden ser fundamentales en el ámbito de la rehabilitación, la prevención y la predicción frente a la toma de decisiones en cuanto a los tratamientos a administrar si existe la posibilidad de estimar previamente los resultados que pueden ser obtenidos para estos tratamientos.

Extrahospitalariamente, cobra una importancia vital el hecho de conocer el impacto real de la enfermedad en la vida cotidiana del paciente. Demostradores como el que se desarrollará en IBERUS ha de permitir medir el entorno de la persona, las barreras a las que ha de hacer frente o el tipo de soporte social y/o económico que posee ya que estos factores, entre otros, condicionan tanto el avance de las enfermedades SNMS como su evolución y mejoría.